Una lectura de Un dique contra el Pacífico, de Marguerite Duras, editado por Tusquets.
Por Valeria Tentoni.
En 1958 René Clément filmó una versión de Un dique contra el Pacífico. Con la venta de los derechos para el cine de ese libro, Marguerite Duras se compró una casa en Neauphle-le-Château, a unos cuarenta kilómetros al oeste de París. Instaló su habitación en el primer piso. La ventana daba al jardín, donde todo reverdecía. Hasta las paredes. Pero ella no le decía “el jardín”; le decía “el parque”.
Así que era un parque. (más…)