Cada libro crea un autor modelo al igual que un lector modelo.
Por Luciano Lamberti.
Esta es la historia de un fracaso. El protagonista del fracaso soy yo, como no podía ser de otra manera, y la cuestión tiene que ver con un libro que intenté leer y no pude. Las constelaciones oscuras, se llama el libro, y es la segunda novela de Pola Oxariaxac, que con Las teorías salvajes había causado un pequeño revuelo en el mundillo literario local y cosechado elogios de voces tan autorizadas como las de Ignacio Echeverría o Ricardo Piglia. No leí esa primer novela por misteriosos motivos, y cuando pude acceder a la segunda tenía infinitas ganas de ver cómo escribía esa chica. La historia era prometedora; las primeras páginas, ubicadas atrás en el tiempo, también lo eran. La prosa es extraña pero divertida. Se nota que la autora es inteligente. El libro tiene todo para ganar, pero después de varios intentos decidí dejarlo. Ya está, no puedo más.